Entrevista a Gloria Demassi

GLORIA DEMASSI:
“Yo siento un enorme agradecimiento a El Galpón, que me ha dado, a esta altura de la carrera, la oportunidad de hacer este personaje maravilloso”

Gloria Demassi, una de nuestras más destacadas actrices, la cual realizó su extensa carrera en el Teatro Circular y luego en la Comedia Nacional, hasta retirarse al llegar al límite de edad, vuelve a El Galpón y a esta obra en particular, con el personaje protagónico de la laureada obra norteamericana Agosto.

-En la versión anterior de Agosto, en el 2010, en circunstancias dolorosas como fue la pérdida de María Azambuya, que protagonizaba la obra, te convocaron para sustituirla y enseguida, solidariamente, encaraste la sustitución para seguir adelante con la obra que convocaba a mucho público. ¿Cómo vivís en lo personal y desde el punto de vista artístico esta nueva etapa?

-Estoy viviendo plenamente esta obra. Es una obra maravillosa para actores, te permite desde el punto de vista físico, psicológico, acudir y recurrir a toda la artillería expresiva que uno pueda tener dentro, de haberlas aprendido durante tantos años. Estoy poniendo lo mejor de mí y disfruto mucho, mucho esta obra.
Y este personaje es maravilloso, como se decía antes: “un boccato di cardenale”.

-En la obra, a través de varias generaciones, con sus encuentros y desencuentros, en esa familia norteamericana se refleja la historia del país; a la vez, tu personaje central carga con responsabilidades y secretos relevantes. ¿Cómo ves, desde tu rol, los temas que plantea la obra y las características de tu personaje?

-Claro, en apariencia muestra, en primera instancia, la vida de una familia muy disfuncional, norteamericana, que se va deteriorando hasta el último momento, de a poco y con problemas muy graves. Es un deterioro que se va produciendo a través de la obra, creo que el autor evidentemente se refiere al deterioro de su país, a la decadencia de la sociedad. Y es muy interesante irlo detectando a medida que avanza la obra. También está el tema del racismo, el deseo de triunfo en la vida, que hace que se vaya detrás de un imposible siempre, aun cuando el ser humano no pueda más.

-En una entrevista anterior, el director, Héctor Guido, señalaba la importancia del humor para tratar los temas que plantea la obra respecto a la convivencia como familia y como nación. Desde tu personaje, ¿cómo te involucrás en ese clima?

-El humor es imprescindible en esta obra, o esa intuición o esa visión de ir por el lado del humor; la obra te va llevando hacia ese lado. Si uno se pone racional, si yo tomo esto como tragedia, porque lo que sucede es trágico en la obra, no das con la clave de ella. Y sería imposible de soportar. Porque estaría siempre en la misma clave, porque no hay respiro, el humor es necesario y, además, tiene golpes de humor fantásticos. En las cosas más terribles que se dicen, la gente se ríe y esto es muy bueno para el espectáculo. Si yo me pusiera a decir
determinadas frases desde el dolor en profundidad, como una tragedia, no daría resultado, no te conduce a lo que quiere producir el texto, que es el humor negro; no hay otra manera de encararlo.

-¿Algo más que desees agregar sobre este reencuentro con la obra y el escenario de El Galpón?

-Yo siento un enorme agradecimiento a El Galpón, que me ha dado, a esta altura de la carrera, la oportunidad de hacer este personaje. Ya sabés que tengo muchos años y ese escenario es muy grande, requiere una gran energía y yo creo que tiene toda la energía necesaria como la estamos haciendo, es un elenco joven, son fantásticos y quisiera estar a la altura. Desearía que esto saliera como pensamos. El Galpón me recibe siempre con gran calidez, me
siento protegida, que a esta edad es muy importante para mí. Además, siento agradecimiento por poder festejar los 75 años de El Galpón, y el homenaje que se le hace a Rulo Delgado y María Azambuya, que fue la última obra que hizo.