ABRIL EN CINEMATECA

Luego de finalizada la 42.^a edición del Festival Internacional de Cinemateca llegan a nuestras salas los siguientes estrenos:

De Brasil, llega Inventario de imágenes perdidas, de Gustavo Galvão. En un futuro cercano, una revolución fundamentalista arroja al país a la guerra civil. María y Larissa huyen y se esconden en el campo. Sus caminos se cruzan en una casa donde comparten sus angustias y experiencias. Sin embargo, la casa no está vacía. La pueblan las imágenes y los recuerdos de un viejo cineasta tan olvidado como el propio cine.

No esperes demasiado del fin del mundo, del director rumano Radu Jude. Una ayudante de producción sobrecargada de trabajo y mal pagada debe conducir por la ciudad de Bucarest para filmar testimonios para un video de seguridad laboral encargado por una multinacional. Cuando uno de sus entrevistados hace una declaración que desata un escándalo, se ve obligada a reinventar toda la historia. En esta película Jude reflexiona, por un lado, sobre el problema de la producción de imágenes y su sustancial superficialidad, y, por otro, construye una película fragmentaria —en partes iguales comedia negra, road movie y película de montaje— que se interroga sobre el trabajo y la explotación en la nueva economía de la flexibilización laboral.

Yo capitán, película italiana dirigida por Matteo Garrone. Seydou y Moussa son dos jóvenes inmigrantes que abandonan Dakar para emprender su camino a Europa. Yo capitán es una odisea contemporánea, un cuento de hadas homérico, a través de los peligros del desierto, los horrores de los centros de detención en Libia y los peligros del mar. Matteo Garrone, consciente de la complejidad del tema que aborda, elige enfocarse en sus personajes para narrar desde su condición humana. León de Plata en el Festival de Venecia y Premio del público en San Sebastián.

De Dinamarca, llega El bastardo, de Nikolaj Arcel. En 1755, el empobrecido capitán Ludvig Kahlen se dispone a conquistar los duros e inhóspitos páramos daneses con un objetivo aparentemente imposible: crear una colonia en nombre del rey. Sin embargo, el único gobernante de la zona, Frederik de Schinkel, cree que esa tierra le pertenece a él y no al rey. El terrateniente hace todo lo posible por ahuyentar a Kahlen y cobrarse una cruel venganza. Pero Kahlen no se doblega, sino que emprende la desigual batalla, arriesgando su vida y el vínculo con las personas que lo rodean. La película sigue la historia de Ludvig Kahlen, que persiguió toda su vida el sueño de que el páramo le trajera riqueza y honor.

De Uruguay, Salam, de Agustina Willat García. El pueblo saharaui vive desterrado desde hace casi medio siglo en el desierto más árido del continente africano. Allí, donde escasean recursos básicos como el agua, hay una escuela de cine. Mientras el mundo mira para otro lado, un grupo de jóvenes cineastas lleva adelante una batalla contra el olvido. La directora de Salam se pregunta: ¿por qué una uruguaya hace una película en el desierto del Sahara? Y descubre que el cine es una forma de tender puentes, acortar distancias y profundizar la comprensión.

Además, repasaremos algunas de las películas de John Frankenheimer y Terence Davies, y mucho más.

Como siempre, toda la programación podrá conocerse en el sitio web de Cinemateca, www.cinemateca.org.uy

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¡Nos vemos en el cine!