«Estaremos llevando nuestra pasión para el gran público»
Hugo Fattoruso, uno de nuestros mayores creadores musicales, cuyo talento trasciende fronteras, se presenta junto a dos virtuosos como Popo Romano y Nicolás Ibarburu en el Teatro Solís, con temas de siempre e inéditos, en lo que promete ser una gran jornada musical.
–Estás nuevamente en Japón, una tierra oriental con la cual ya tenés una afinidad mantenida en el tiempo, a partir de tu encuentro creativo con Yahiro Tomohiro. ¿Qué estás realizando en este momento en Japón?, ¿cuáles son las reacciones del público de ese país en los recitales?
-Estamos casi al final de nuestra decimotercera gira consecutiva de Dos Orientales en Japón, siete semanas, de norte a sur, de este a oeste. Albana Barrocas se suma en la segunda parte de nuestros recitales, quedando así tres orientales. El público japonés es como una esponja que absorbe, disfruta, acompaña, con la mayor atención y alegría, diría… Para finalizar el recital, siempre tocamos candombe con los tres tambores: chico, repique y piano… ¡Les agrada y más! La ciudad más al norte de esta gira fue Asahikawa; la más al Sur fue Oita.
–La fusión de géneros y estilos musicales —esa búsqueda en la cual has sido un pionero y un experimentador permanente— hoy ya es un signo reconocido en la música contemporánea. ¿Cómo ves este fenómeno y qué destacarías del estado actual de la música contemporánea?
-¡Uh ! No sé responder… escucho (escuchamos) música folclórica y música regional. No escucho fusión. Tango sería “lo más ciudadano” de mis escuchas .Todo lo demás es folclore. Es lo que me seduce. Es lo que admiro. Es la raíz, donde está la fuerza. Si fusiono es porque no me sale otra cosa. (Risas)
–Has compartido escenarios y estudios de grabación con músicos de varias partes del mundo. ¿Cómo ha influido en tu creación ese diálogo creativo?
-Siempre se aprende, siempre. No importa el estilo o el nivel de quienes invitan; yo los considero maestros, pues siempre aprendo algo… a menos que sean los grandes grandes… de los grandes grandes, en realidad yo no puedo aprender, pues están en otro nivel; he tocado con un puñado de estos grandes maestros… en realidad, estos maestros me dejaron tocar con ellos… (Risa). Y, repito, son de un nivel muy alto para mis posibilidades, por ende, no pude aprender nada de ellos.
–Y con los músicos uruguayos también ha sido permanente el encuentro, desde Rada en la época fundacional a Leo Maslíah, por citar a dos creadores influyentes. En esta oportunidad compartís escenario con Romano e Ibarburu. ¿Qué nos podemos esperar del espectáculo y cómo se complementan creativamente contigo?
-Popo Romano y Martín Ibarburu son maestros, expertos, compañeros, amantes de lo que hacen, dedicados y más adjetivos. Es una gran alegría poder compartir con ellos y llevar al gran público nuestros impulsos, sueños y propuestas. Varios temas inéditos, esto refresca el aire, es sello; siempre presentando nuevas propuestas, nuevas composiciones. Tenemos invitados muy queridos y especiales: Julieta Taramasso, en bajo eléctrico, la más joven en el escenario y tremenda bajista; Albana Barrocas, compañera de rutas, escenarios, grabaciones, percusionista de búsquedas infinitas, incansable; y Fede Vaz, tremendo instrumentista (armónica), un capo como persona y como músico.
–¿Algo más que quieras agregar del espectáculo próximo?
-Estamos esperando ansiosos y felices este evento. Estaremos llevando nuestra pasión para el gran público. Amasaremos el pan a ojos vistas.