Klondike

Julio de 2014. Esta película de Maryna Er Gorbach se ambienta en la región de Donbass de Ucrania, y su descripción de la guerra tiene una actualidad sombría. El film utiliza el derribo en la vida real del vuelo 17 de Malaysia Airlines en 2014 como telón de fondo para su historia de lucha y resistencia. Irka (Oxana Cherkashyna) está embarazada de siete meses y vive en el campo con su pareja Tolik (Sergiy Shadrin); al comienzo de la película, se enfrentan al dilema de si deben huir o no del área. Tolik, desesperado y dócil, quiere seguridad por encima de todo, mientras que Irka se resiste a abandonar la granja a la que llaman hogar. Atrapados entre los separatistas rusos por un lado y la expectativa de lealtad a Ucrania, la pareja intenta equilibrar las demandas urgentes y conflictivas de la guerra civil, y no es una tarea fácil.
Desde que Ucrania ha saltado a los titulares de prensa desde febrero de este año, el interés de la película se redobla, pero sus méritos van más alá de la circunstancia. En declaraciones al medio francés La liberté, Er Gorbach ha explicado sus razones: “En Ucrania también había propuestas, sobre todo de los productores, para rodar películas más ligeras, comedias. Pero siempre he tenido la sensación de que no hay que negar la evidencia. Cuando vives en un país en guerra, solo puedes gritar. Ahora, claro, es demasiado tarde, pero creo que la película explica bien la personalidad de los ucranianos y el funcionamiento del país”.
Quinto largometraje de Maryna Er Gorbach, Klondike ganó el premio World Cinema Dramatic del Festival de Cine de Sundance y el Gran Premio del Festival Internacional de Cine de Friburgo.  En el momento de su exhibición en Sundance, el crítico Andrew Haigh describió a la película como “una obra cinematográfica estimulante, meticulosamente encuadrada, finamente orquestada y bellamente interpretada, una película sobre las decisiones que tomamos cuando el mundo se desmorona”. Para Guy Lodge, de Variety, la película resulta «desgarradora , sin concesiones, formalmente destacable. Película potente, rodada en tomas ininterrumpidas y sin pestañear que observan la violencia obscena y la destrucción con fría franqueza». Según David Karz, de Cineuropa «Maryna Er Gorbach ofrece una mirada sin pestañear al abismo, un despiadado panorama de lucha que no está interesado en las imágenes de cine verité que supuestamente otorgan a películas con este tema cierta autenticidad»