Una semana y un día

El relato ubica el drama de un matrimonio maduro que sufre la muerte de su hijo de 25 años. La cámara acompaña el último de los siete días que dura el shiva (período de duelo) y la jornada siguiente (de allí el título), concentrándose sin caer en golpes bajos las distintas reacciones de Eyal Spivak (Shai Avivi), con arranques de violencia por la sensación de frustración y ciertas regresiones; y de su esposa Vicky (Evgenia Dodina), más sumergida en el dolor y una desconexión que intenta quebrar aferrándose en su cotidianeidad. Por momentos surgen situaciones de humor absurdo en medio de la angustia, y el encuentro del padre con el hijo de unos vecinos y que alguna vez supo ser amigo del muchacho muerto. Relato sensible y aleccionador que trata sobre la forma de procesar el duelo y como se puede salir adelante con su vida. Premiada en como Mejor Película y Director por la Academia de Cine de Israel