Mayo en Cinemateca.

Cinemateca Uruguaya / 2 mayo, 2022 /

Ciclo 70 años, 70 películas. A lo largo de estos años nuestros espectadores identifican algunas películas como “bien de cinemateca”. Para este ciclo, que va a durar todo el 2022 en el que conmemorar nuestros 70 años, fuimos a nuestro archivo para traer 70 títulos que nuestros socios atesoran. Serán 7 ciclos, de 10 películas cada uno, que comienza en este mes de mayo. Algunos de los títulos serán: Kaos, de Paolo Taviani y Vittorio Taviani; ¿Soy linda?, de Doris Dörrie; El hombre de mármol, de Andrzej Wajda; Diva, de Jean-Jacques Beineix; Los hijos de Fierro, de Fernando Solanas; Los santos inocentes, de Mario Camus; Conspiradores del placer, Jan Švankmajer; ¿Dónde está la casa de mi amigo?, de Abbas Kiarostami; La Reina Africana, de John Huston; Sex mission, de Juliusz Machulski.

Además, entre los estrenos del mes tenemos los siguientes títulos:

Deserto Particular. Película brasilera dirigida por Aly Muritiba. El protagonista (Antonio Saboia) es un policía brasileño que ha sido suspendido por una investigación interna tras un incidente con un nuevo recluta. El hecho llega a los medios y las redes sociales, debido a lo cual el personaje ignora qué pasará con su trabajo. Entre tanto, trabaja en la seguridad en un boliche. Cuida de su padre enfermo, un anciano que no puede valerse por sí mismo y necesita cuidados intensivos, y comparte ese cuidado con su hermana, quien en determinado momento le cuenta que está en pareja con una mujer, lo que saca a relucir en nuestro personaje un costado de homofobia.
Introvertido, solitario, bastante cerrado, aparentemente a la espera de algo en la vida que no se sabe muy bien lo que es. El único vínculo que mantiene por internet y por redes sociales es con una chica que no conoce personalmente, y que vive en el norte de Brasil. A cierta altura pierde el contacto y se larga a buscarla.

La película retrata un universo donde a veces las circunstancias parecen prohibirle a la gente reconocerse como realmente es, generando dificultades en el camino. Un romance inesperado hará que Daniel se acepte a sí mismo sin tapujos.

El empleado y el patrón. Película uruguaya dirigida por Manuel Nieto. Rodrigo (Nahuel Pérez Biscayart) es un joven hacendado que está al frente de uno de los campos de su padre (Jean Pierre Noher) al norte del Uruguay. Está casado con Federica (Justina Bustos) y tienen un hijo muy pequeño con probables problemas de salud. Ante la necesidad de manejar una cosechadora, contrata a Carlos (Cristian Borges), un joven de la zona que a su vez está casado y tiene una hija pequeña. Una situación inesperada tensará la relación entre ambas familias.

El núcleo de la película plantea claramente un conflicto de clases, pero modificando algunos aspectos en los que esta problemática suele expresarse, eludiendo el obvio (y tentador) blanco y negro. El retrato de Rodrigo está lejos de los estereotipos que el cine (y los discursos políticos) suelen asignar a alguien de su posición social, y ello imprime una dinámica diferente al conflicto y a la relación con el hermético Carlos y su familia. Alguien ha establecido alguna relación con La ceremonia de Chabrol, película con la que se ha señalado que tiene algún punto de contacto.
El conflicto de clases (exacerbado por la situación puntual que no corresponde adelantar) se manifiesta en diferentes planos, algunos explícitos y en parte fuera de campo, y otros encuadrados en el marco de lo posible, lo latente. Cabe destacar la carga ominosa de la película y el constante sentido de inminencia: el espectador siente en todo momento que algo puede perturbar la aparente calma de las situaciones, la precaria armonía sostenida por los protagonistas. El hermetismo de Carlos colabora en la creación de ese clima inquietante.
Hay una considerable solvencia en la realización del uruguayo Nieto, cuyos antecedentes incluyen La perrera (2025) y El lugar del hijo (2014). Su descripción del trabajo en el campo, del campo mismo, de los moradores de esa frontera y de una subtrama relativa a una competencia con caballos muestra una gran pericia en la puesta en escena que en algunos momentos adopta un aire casi documental.

El guion es perfecto al dibujar ese entramado de personajes, con sus dobleces y sus ambigüedades, pero también lo es la cámara cuando busca repetidamente seguir su propio camino en forma paralela a la narración.

Parece tan interesada en la dualidad de clases como en el entorno, incluyendo al sonido, como si captara las fuerzas invisibles que terminarán obligando a todos a comportarse de cierta manera, debido a —o a pesar de— su relación laboral y su entorno social. El empleado y el patrón propone, a su manera, redibujar las cartas del código de relaciones de dominio y explotación que rigen como leyes de hierro las relaciones laborales y humanas. El resultado es de una exquisita precisión.

El otro Tom. Película mexicana dirigida por los uruguayos Rodrigo Plá y Laura Santullo. Elena es madre soltera y depende de los servicios sociales. Su hijo Tom tiene dificultades de comportamiento y es estigmatizado en la escuela como “niño problema”. La ausencia del padre forma parte del complicado vínculo entre ellos. Tom será diagnosticado con Trastorno por déficit de atención e hiperactividad y atendido por esa dolencia. Sin embargo, un extraño accidente pondrá a su madre en guardia contra la medicación psiquiátrica. Su negativa a seguir dándole fármacos provocará que los servicios sociales amenacen con retirarle la custodia. Con un padre que se ha quedado en México, donde ha formado una nueva pareja, Tom mantiene una relación bastante simbiótica y al mismo tiempo ríspida con su madre y es víctima no solo de la mencionada burocracia sino también de la insensibilidad social y la absoluta incapacidad de las instituciones para lidiar con chicos que pueden resultar en apariencia disruptivos en su caos cotidiano, pero que —tratados con paciencia y delicadeza— pueden dar rienda suelta a todo su talento (en este caso, el dibujo).

Todo parecía servido para un melodrama lacrimógeno, pero afortunadamente la dupla Plá-Santullo se concentra más en los personajes (nobles y entrañables, aunque al mismo tiempo marcados por múltiples contradicciones) que en la bajada de línea, consiguiendo así un relato emotivo sin apelar al golpe bajo. El final, hermoso y cálido, evita todo atisbo de esa crueldad lindante con el sadismo característica de cierto cine mexicano.

Mirador. Película uruguaya dirigida por Antón Terni. Pablo tiene 34 años, es ciego y vive solo en Bello Horizonte. Óscar y Valeria son sus amigos, también ciegos, con los que se va de campamento y a rockear a un concierto. De vez en cuando Pablo escucha unos viejos casetes en los que ha grabado conversaciones con sus amigos y prepara licores caseros, a los que etiqueta usando una regleta de escritura braille.

Mirador registra la vida de Pablo y sus amigos con curiosidad y cuidado y, aunque la película de Terni se presenta como un documental, tiene los ritmos y las texturas de una obra de ficción. La cámara acompaña a los amigos, los registra y se cuenta una historia. El espectador asiste a esa intimidad sagrada y pronto se da cuenta de su privilegio, que es el del cine: está viendo sin ser visto. Y lo que ve es la camaradería y el humor de tres amigos a los que no los une la ceguera, sino el amor. No hay amargura en Mirador, solo pura y franca alegría de vivir, a pesar de las dificultades físicas o económicas que pueden enfrentar los amigos. La vida no es un desafío a superar, sino que se la toma como viene y se la disfruta con lo que se tiene, que es mucho. En Mirador, la ceguera no es un tema, ni siquiera una condición, es algo que está allí, como la luna o el sol. “Uno solo está perdido cuando quiere volver a algún lugar”, reflexiona Pablo. “Mientras tanto no lo está”. Un alegato a favor de vivir el momento presente con la mayor intensidad posible que la película de Terni documenta de manera sensible y afectuosa.

Toda la programación podrá conocerse en el sitio web de Cinemateca, www. cinemateca.org.uy.

Para estar en contacto seguinos en Twitter CinematecaURU o en Instagram @ cinematecauruguaya.

 

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